La propuesta para el CEFE Tunal parte de una premisa clara: insertar arquitectura sin restar naturaleza. El edificio emerge del parque y prolonga el espacio verde en su cubierta, convirtiéndola en un mirador público hacia los cerros y la ciudad.

El volumen define una fachada urbana activa, habilitando dos accesos controlados que conectan con una calle peatonal interior. Este corredor público funciona como vestíbulo abierto para las actividades culturales y deportivas, extendiendo la vida del parque hacia el interior del edificio.

El programa se organiza en tres cuerpos principales: uno cultural, otro deportivo y un volumen intermedio que articula ambos usos con un espacio múltiple de encuentro comunitario. Esta disposición garantiza una integración funcional clara y accesible para todos los usuarios. Las visualizaciones refuerzan el carácter del proyecto: el vestíbulo interior se convierte en un espacio social vibrante, pensado para caminar, sentarse, jugar o andar en bicicleta. La piscina cubierta destaca por su iluminación natural y su escala generosa, que la convierte en un espacio público de gran calidad. El volumen cultural incluye un auditorio, salas de exposición y aulas flexibles que enriquecen la vida cultural del sector.

Con un lenguaje sobrio y eficiente, el diseño busca armonizar con el entorno, respetar la estructura ecológica y ofrecer un espacio inclusivo, abierto y versátil. El CEFE Tunal no interrumpe el parque: lo amplifica, lo conecta y lo pone al servicio de la comunidad.